La Celestina
"La Celestina", atribuida casi en su totalidad al bachiller Fernando de Rojas, es el nombre con el que se conoce desde el siglo XVI a la obra titulada primero Comedia de Calisto y Melibea y después Tragicomedia de Calisto y Melibea. Sus logros estéticos y artísticos, la caracterización psicológica de los personajes —especialmente la tercera, Celestina, cuyo antecedente original se encuentra en Ovidio—, la novedad artística con respecto a la comedia humanística, en la que parece inspirarse, y la falta de antecedentes y de continuadores a su altura en la literatura occidental, han hecho de "La Celestina" una de las obras cumbre de la literatura española y universal. La obra comienza cuando Calisto ve casualmente a Melibea en el huerto de su casa, donde ha entrado a buscar un halcón suyo, pidiéndole su amor. Ésta lo rechaza, pero ya es tarde, ha caído violentamente enamorado de Melibea. La loca pasión por Melibea ,hija de un rico mercader, lleva al joven Calisto a romper todas las barreras y a aliarse con una vieja alcahueta, la Celestina. Desde el momento en que entra en escena, Celestina avasalla toda la obra hasta convertirse en un personaje literario de fama universal. Escrita entre 1499 y 1502, "La Celestina" es una de las obras más leídas y comentadas de la literatura española. Escrita enteramente a manera de diálogo, se considera que esta marca el final de la Edad Media y el comienzo del Renacimiento en la literatura española. Por su forma se le considera una novela y al mismo tiempo una obra de teatro. Sin duda, es la obra más relevante de la literatura española en el siglo XV.